La reconciliación de Iñárritu y Arriaga marca los 25 años de Amores Perros

Bellas Artes, Ciudad de México. – El Palacio de Bellas Artes fue testigo de un reencuentro cinematográfico que parecía imposible: Alejandro González Iñárritu y Guillermo Arriaga, creadores de la icónica Amores Perros, hicieron las paces tras más de dos décadas de distancia y celebraron juntos el 25 aniversario de la película que marcó un antes y un después en el cine mexicano.

La velada comenzó con la proyección de la versión restaurada en 4K de Amores Perros, acompañada por un emotivo concierto en vivo de Gustavo Santaolalla, compositor de la banda sonora original. Ante un público emocionado, los cineastas subieron al escenario y sellaron su reconciliación con un abrazo que desató una ovación de pie.

Guillermo Arriaga compartió su emoción: “En momentos de vida profunda siempre hay posibilidad de reconciliación. Es hermoso que este señor y yo estemos juntos de nuevo, como lo que siempre fuimos: hermanos”. Por su parte, Iñárritu reconoció que la separación, iniciada tras la trilogía que cerró con Babel (2006), fue dolorosa pero necesaria para su crecimiento creativo.

El reencuentro en Bellas Artes no solo celebra 25 años de una de las películas más influyentes del cine contemporáneo, sino que también simboliza la fuerza de la colaboración y la amistad en el mundo artístico. Antes de la proyección, ambos cineastas recordaron que “diversas voces nos azuzaron para confrontarnos. Hoy pesan más las voces de nuestras familias y de la gente que nos quiere, que nos impulsaron a reconocer la valía del afecto perdido entre nosotros y que hemos decidido recuperar”.

La reconciliación de Iñárritu y Arriaga se convierte así en un acto cinematográfico en sí mismo: un final esperado y emotivo que los fans de Amores Perros y del cine mexicano celebrarán durante muchos años.