Visita Sheinbaum Pantepec

• La reconstrucción de la Sierra Norte avanza.

Sin discursos triunfalistas ni improvisación, la respuesta oficial ante el desastre que dejó la tormenta Jerry en la entidad poblana avanza bajo un esquema de coordinación técnica. En el terreno, la prioridad inmediata sigue siendo garantizar la seguridad, la comunicación y la salud de las familias de la Sierra Norte.

Por eso, los proyectos para levantar a los municipios afectados, incluyen la rehabilitación de caminos, la reconstrucción de puentes y la reposición de viviendas dañadas, y un constante monitoreo meteorológico por las lluvias que aun persisten.

Tras los estragos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, recorrió las zonas afectadas y regresó este fin de semana para recorrer Pantepec, por lo que ordenó la atención permanente de la región. A partir de su visita, se intensificaron los recursos que el gobierno poblano implementó, a la zona arribaron el gabinete federal que desplegó diversas acciones de apoyo, con la presencia de dependencias como la Secretaría de la Defensa Nacional, la Marina, la Guardia Nacional, Salud federal, Protección Civil nacional y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes.

En la Mañanera del Pueblo, el Gobernador, Alejandro Armenta precisó que de las 77 comunidades que permanecían incomunicadas al inicio del desastre, actualmente solo 13 continúan sin conexión, dentro de los 23 municipios afectados.

En municipios como Tlacuilotepec, Tlaxco y Pahuatlán, considerados entre los más afectados, el gobernador Alejandro Armenta encabezó recorridos junto con Leticia Ramírez Amaya, coordinadora general de Asuntos Intergubernamentales y Participación Social del Gobierno de México. En campo, supervisaron la apertura de caminos, la instalación de puentes provisionales y la operación de brigadas médicas.

En Tlacuilotepec, cuatro puentes fueron destruidos por la crecida de los ríos. Las fuerzas armadas y el Gobierno estatal trabajan en la rehabilitación de los accesos y en la construcción de un puente peatonal colgante que permitirá el tránsito temporal de los habitantes. Desde el Centro de Mando instalado en Huauchinango, el vicealmirante Francisco Sánchez González coordina once frentes de trabajo con maquinaria y personal de los tres niveles de gobierno.

El secretario de Salud federal, David Kershenobich Stalnikowitz, encabezó reuniones en la zona para reforzar la vigilancia epidemiológica y evitar brotes de enfermedades infecciosas. Informó que la segunda fase de la contingencia, centrada en la recuperación, incluye campañas de saneamiento y atención médica en comunidades afectadas.

Por ello, se mantiene desplegadas más de 127 brigadas en 39 comunidades, con prioridad en Huauchinango y Xicotepec, donde se registraron los mayores riesgos por dengue. En tanto, IMSS-Bienestar instaló 42 carpas médicas en 69 localidades, mientras que el ISSSTE opera unidades de apoyo en Huauchinango, Xicotepec y Pahuatlán.

En Pahuatlán, el gobernador Armenta y la funcionaria federal Ramírez Amaya encabezaron un recorrido en la comunidad de Paciotla, donde supervisaron escuelas, viviendas y caminos dañados. Se habilitaron pasos provisionales y se enviaron equipos de maquinaria pesada para restablecer el acceso a las zonas incomunicadas.

El presidente municipal Eduardo Romero informó que más de 500 habitantes colaboran en la apertura de caminos y limpieza de escombros, apoyados por personal de Protección Civil, el Ejército y la Guardia Nacional. La prioridad, dijo, es recuperar la conectividad y garantizar el suministro de víveres y servicios básicos.

El censo de daños radica en 23 municipios y la atención continúan en albergues con la entrega de apoyos y asistencia. En paralelo, la Comisión Federal de Electricidad y Pemex trabajan en el restablecimiento de energía y suministro en comunidades rurales.

De igual forma, la presidenta del Patronato del Sistema Estatal DIF, Ceci Arellano, visitó el albergue temporal instalado en el municipio, uno de los más afectados por las intensas lluvias registradas en la Sierra Norte. En el lugar, la presidenta llegó con cuatro camiones llenos de colchonetas, ropa, agua y alimentos no perecederos para las personas damnificadas, con estos camiones ya suman 11 que llegan con víveres para la población.

La atención a las familias no se limita ahí, para muchos habitantes, los animales forman parte de su núcleo, por lo que el Instituto de Bienestar Animal (IBA), con apoyo de brigadas veterinarias y el respaldo de la UNAM, atendió a 99 animales afectados por las lluvias y deslaves en la Sierra Norte de Puebla, informó José Luis García Parra, Coordinador de Gabinete del Gobierno estatal.

Entre los animales atendidos se encuentran 87 perros, 11 gatos, 4 cerdos y 2 caballos.

Se habilitaron albergues en La Ceiba y el Recinto Ferial de Huauchinango para el resguardo temporal de los animales, de los cuales 33 perros y 1 gato permanecen bajo cuidado especializado. Los equipos médicos veterinarios se encargan de atender lesiones, quemaduras y enfermedades respiratorias derivadas de las inundaciones.

García Parra señaló que, además del rescate y atención médica, se brindó orientación a 67 familias afectadas, garantizando seguimiento veterinario y cuidado de los animales bajo su responsabilidad. La acción forma parte de la estrategia estatal de atención integral a las comunidades afectadas por la temporada de lluvias.

Lo que seguirá una vez que la Sierra Norte se levante, será generar un plan de reactivación turística para los municipios dañados, para restablecer la actividad económica y turística.

Ya se anunció la iniciativa del gobernador, quien pidió a la Secretaría de Desarrollo Turístico, Carla López-Malo elaborar un programa integral que contemple la rehabilitación de caminos, reconstrucción de infraestructura turística y apoyo directo a prestadores de servicios afectados.

Análisis de la vulnerabilidad de Puebla ante lluvias intensas

La Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) emitió alertas por lluvias de gran intensidad en Puebla, lo que llevó al gobierno estatal a suspender clases en más de 5,800 escuelas. Aunque la población estaba consciente de la llegada de precipitaciones fuertes, la magnitud del desastre superó las expectativas. En pocas horas, se registraron más de 30 derrumbes que bloquearon carreteras, siete puentes colapsaron y decenas de comunidades quedaron incomunicadas.

La Sierra Norte, una región especialmente vulnerable debido a su topografía y a la deforestación, se convirtió en la zona más afectada. A pesar de que se activaron alertas tempranas, el volumen de lluvia superó los niveles previstos, saturó los suelos y provocó deslizamientos, así como el desbordamiento de ríos y arroyos.

La magnitud de los daños movilizó a los tres órdenes de gobierno, que mantienen desde hace una semana un operativo conjunto para restablecer la comunicación terrestre, atender a las comunidades afectadas y prevenir riesgos sanitarios derivados de la emergencia.

Pes relevante mencionar que Puebla se encuentra geográficamente expuesto a fenómenos hidrometeorológicos debido a su localización entre el Océano Pacífico y el Golfo de México, y entre el Trópico de Cáncer y el Ecuador. Su relieve accidentado —colindante con la Sierra Madre del Sur, el Eje Neovolcánico, la Sierra Madre Oriental y la Llanura Costera del Golfo Norte— aumenta su vulnerabilidad.

Durante la temporada de lluvias y ciclones tropicales, que en el Pacífico se extiende del 15 de mayo al 30 de noviembre, y en el Atlántico, Mar Caribe y Golfo de México del 1 de junio al 30 de noviembre, el estado se expone a tormentas, depresiones tropicales, huracanes, vientos fuertes, inundaciones y deslizamientos de laderas, con potencial de causar daños severos a la población y a la infraestructura.

Este escenario evidencia la necesidad de reforzar la gestión de riesgos por lo que el Gobernador del Estado, Alejandro Armenta hizo un llamado a las y los presidentes municipales de actualizar sus Atlas de Riesgo.