Durante 2025, el estado de Puebla acumuló 2 mil 260 personas diagnosticadas con desnutrición, de acuerdo con los registros epidemiológicos de la Secretaría de Salud Federal, correspondientes al periodo de enero a noviembre. Las cifras confirman que el problema nutricional continúa siendo un reto relevante de salud pública en la entidad.
Del total de casos contabilizados, la desnutrición leve concentró la mayor incidencia, con 1 mil 749 diagnósticos, lo que representa más del 77 por ciento de los registros. En tanto, 354 personas presentaron desnutrición moderada, mientras que 157 casos fueron clasificados como severos, el nivel de mayor riesgo por su asociación con complicaciones clínicas y mayor vulnerabilidad.
El desglose por sexo muestra una afectación ligeramente mayor en mujeres, con 1 mil 183 casos, frente a 1 mil 77 hombres, una distribución que refleja una incidencia relativamente equilibrada, aunque con predominio femenino en los reportes oficiales.
En el contexto nacional, Puebla se ubica alrededor del lugar 19 en número de casos de desnutrición, en un escenario donde la Secretaría de Salud federal ha contabilizado más de 21 mil diagnósticos en todo el país durante el mismo año. Estados como Chihuahua, Estado de México y Jalisco encabezan la lista de entidades con mayor incidencia.
El fenómeno también alcanza a la población infantil, ya que informes complementarios indican que 592 niñas y niños fueron diagnosticados con desnutrición en Puebla en 2025, de los cuales al menos 37 presentaron cuadros graves, lo que refuerza la preocupación por el impacto a largo plazo en el desarrollo y la salud de este sector.
Desde una perspectiva especializada, los datos sugieren la persistencia de factores estructurales como pobreza, inseguridad alimentaria y acceso limitado a servicios de salud y orientación nutricional, elementos que inciden directamente en la prevalencia de la desnutrición.