Joe Biden, contra republicanos del Congreso por no regular posesión de armas de fuego
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha expresado su indignación con los republicanos del Congreso después de que estos no hayan reformado las leyes que regulan la posesión de armas de fuego para evitar tiroteos como el que tuvo lugar este lunes en Louisville, Kentucky.
En un mensaje publicado en Twitter, el mandatario expresó su consternación: “Una vez más, nuestra nación está de luto tras un acto de violencia armada sin sentido. Jill y yo rezamos por las vidas perdidas y que se han visto afectadas por el tiroteo de hoy”.
Biden ha instado repetidamente a los republicanos que controlan la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos, a que se prohíban las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad, ya que estos permiten a quienes portan un arma, matar a un gran número de personas sin tener que detenerse a recargar balas.
Aunque Estados Unidos aprobó un veto federal a las armas de asalto en el país en 1994, este expiró en 2004 sin que el Congreso lo renovara, lo que ha llevado a que se sigan produciendo tiroteos indiscriminados en todo el país.
El tiroteo en Louisville, que se produjo esta mañana en un edificio del centro de la ciudad, ha dejado cuatro personas fallecidas y ocho heridas, entre ellas dos agentes de policía. Uno de los policías se encuentra en estado crítico y ha tenido que ser operado en el hospital universitario de Louisville.
Según ha informado el teniente coronel de la Policía de Louisville, Paul L. Humphrey, el agresor, tenía una conexión con el banco y era un empleado de la institución financiera, aún se desconoce qué arma utilizó el autor del tiroteo.
La Policía de la ciudad precisó que el atacante, identificado como Conner Sturgeon, utilizó un rifle para perpetrar el tiroteo que dejó cuatro muertos y nueve heridos, tres de ellos en estado crítico.
Las cuatro víctimas mortales, tres hombres y una mujer, tenían entre 40 y 67 años, según las autoridades, Sturgeon fue “neutralizado” por los agentes en el intercambio de disparos.
El tiroteo se produjo en un edificio del centro de Louisville donde se encuentra una de las sedes del Old National Bank, un banco regional con sucursales en el sureste y medio oeste de Estados Unidos. La zona donde se encuentra el banco es una de las más concurridas de la ciudad, situada en la frontera de Kentucky con Indiana y donde residen alrededor de 630.000 personas.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, amigo de una de las víctimas mortales, afirmó en una conferencia de prensa que “la primera batalla era frenar al agresor. La segunda es hacer todo lo que podamos para mantener vivos a los heridos” refirió.