Washington presiona a Maduro: EU exige repatriación de migrantes y liberación de presos

Sin previo aviso, la Casa Blanca anunció que Richard Grenell, enviado especial del presidente de Estados Unidos para misiones internacionales, visitará Caracas con el propósito de reunirse con Nicolás Maduro, jefe de Estado de Venezuela, la agenda del encuentro incluirá la negociación de un plan de repatriación de migrantes venezolanos, así como la exigencia de liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en territorio venezolano.

Según fuentes oficiales, la misión de Grenell se centrará en la repatriación de “criminales y pandilleros” de origen venezolano, con énfasis en los integrantes del Tren de Aragua, una de las organizaciones criminales más peligrosas de América Latina.

Esta iniciativa se enmarca en las recientes medidas de seguridad implementadas por el gobierno de Estados Unidos, que busca reforzar el control migratorio y frenar la actividad delictiva vinculada a grupos extranjeros.

El enviado especial del Departamento de Estado para América Latina, Mauricio Claver-Carone, subrayó que la reunión con Maduro incluirá la exigencia de liberar a ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela, muchos de ellos considerados presos políticos por Washington.

Claver-Carone advirtió que esta no es una solicitud negociable y lanzó una dura advertencia al gobierno venezolano:
“Maduro debe atenerse a lo que le indiquemos, o algo malo va a ocurrir”.

Esta postura refuerza la presión que la administración estadounidense ha ejercido en los últimos años mediante sanciones económicas y restricciones diplomáticas, con el objetivo de lograr la liberación de estos detenidos.

Las relaciones diplomáticas entre Washington y Caracas atraviesan uno de sus momentos más tensos. Desde hace años, Estados Unidos ha implementado sanciones contra Venezuela, intentando presionar al gobierno chavista sin obtener los resultados esperados.

Además, tanto la administración de Joe Biden como la de Donald Trump se han negado a reconocer la victoria electoral de Maduro, lo que ha agravado el conflicto entre ambas naciones.

A medida que se aproxima la reunión en Caracas, el resultado de este encuentro podría marcar un nuevo punto de inflexión en la relación entre ambos gobiernos y definir el futuro de los venezolanos que Estados Unidos pretende deportar.