Familiares de extranjeros asesinados en Baja California confirman identidad
Los trabajos forenses, junto con la identificación de los familiares, confirmaron que los tres cuerpos encontrados en un pozo en Baja California son de dos surfistas australianos y un estadounidense que fueron asesinados a tiros en un intento de robo en un balneario del Pacífico mexicano.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California confirmó que los tres cuerpos recuperados cerca de Ensenada corresponden a los tres surfistas desaparecidos desde el 27 de abril pasado.
“La Fiscalía General del Estado confirma que los cuerpos hallados en el pozo en la zona conocida como La Bocana, al sur de Ensenada, corresponden a los de nombre Jake y Callum, de origen australiano, así como el estadounidense Carter”, destaca en un comunicado.
Los familiares identificaron los cuerpos como los hermanos Jake (30 años) y Callum Robinson (33 años), y su amigo estadounidense Jack Carter (30 años), quienes habían viajado a un balneario en el municipio de Ensenada. Fueron reportados como desaparecidos el 27 de abril y sus cuerpos fueron recuperados la tarde del viernes en un pozo en un acantilado.
“La confirmación se da una vez que los familiares de las víctimas pudieron identificarlos, sin la necesidad de realizar pruebas de genética”, añade el comunicado.
La Fiscalía de Baja California informó el pasado domingo 5 de mayo que el homicidio de los tres surfistas extranjeros fue por el presunto robo de un vehículo en el que viajaban y que los cuerpos presentan “orificio por arma de fuego en la cabeza”.
Al parecer, los dos hermanos australianos Callum y Jake Robinson y el estadounidense Jack Carter se opusieron al robo, lo que les costó la vida.
Según explicó la fiscal estatal María Elena Andrade, el móvil del crimen fue el robo de la camioneta en la que viajaban los turistas. Presumiblemente, entraron a una zona aislada y sin señal telefónica para pedir ayuda en caso de un percance, donde fueron interceptados por presuntos criminales para apoderarse de su camioneta, que luego fue hallada incendiada.
“Los agresores sacan un arma que tenían en su poder y privan de la vida al que de inicio se opuso al robo y posteriormente se les echan encima a los otros dos (…) y también los privan de la vida”, dijo la fiscal.
“Todos presentan un orificio producido por proyectil de arma de fuego en la cabeza”, añadió Andrade.