Los diputados de Sergio

Luis David García / @ldgarcia_mkt

Las fotos de los legisladores comenzaron a salir y los medios pronto anunciaron sobre la reunión, el gobernador, que ha buscado darle un lugar y espacio a todos, se reunió con los diputados locales de Morena y el Partido de Trabajo, pero la foto no estuvo en la comunicación de Sergio Salomón, pero hubo foto oficial ¿Para quién era el mensaje?

Las historias, tuits y post lo hicieron evidente. La reunión fue de seguimiento, cumplimiento de acuerdos y lealtad para los que supieron sumarse en los momentos necesarios.

Mucho se ha escrito de aquel fatídico diciembre en el que se nombró a Sergio Salomón cómo el sucesor del Barbosismo, pero fue un primer ejercicio de respaldo. En aquella ocasión, y está demás decirlo, hubo una fracción de diputados que tenían otros intereses dentro de los morenistas, un grupo que evidentemente no estuvo en la reunión reciente.

Carlos Evangelista, Daniela Mier, Iván Herrera, Angélica Cervantes y Yolanda Gámez acusaron de exclusión, por la falta de acuerdo; antes era una línea marcada, en esta ocasión, un tema de equipos, y no es por tener otros intereses, eso lo entiende el mandatario estatal, que ha sumado a sus reuniones hasta a Rodrigo Abdala, antes marginado; y no está mal pertenecer a otro grupo, no está mal hacer política en otras esferas e intereses, eso lo entiende el gobernador, pero la reunión de ayer, tenía otro propósito, no sólo obedece al momento de la designación.

Seguramente en atención, el mandatario les brindará la cortesía de la reunión y la plática, su perfil es de acuerdos, pero también entiende que en la política las lealtades son fundamentales.

Les cuento el segundo acto de confirmación de la reunión…

Cuando la plana mayor de Morena reunida por el gobernador se dio cita en Puebla ocurrieron varias cosas; el gobernador se mostró como un interlocutor de alto nivel ante los intereses políticos de distintos actores, y se manifestaron los inclinaciones y grupos de cada uno de los citados en aquella reunión. El equipo del llamado G5 se mantuvo firme con Nacho Mier, pero ocurrió un detalle del que pocos hablaron.

En algún momento de esta reunión, el senador, Alejandro Armenta, se acercó al mandatario con la intención de quedar bien, para poner a su disposición a” sus diputados”, la apropiación y no otorgarle el lugar que se merecía al nuevo líder político de morena en Puebla no cayó nada bien.

Los diputados locales fueron cuestionados algunos sobre sus lealtades, algunos en ese momento y otros después, pero tuvieron la oportunidad de elegir; la gran mayoría se decantó por el gobernador; este fue el momento de la confirmación y el pase directo a la reunión de seguimiento. Porque ¿Además de los diputados del G5 quién no fue invitado?… exacto, el único diputado que se definió como armentista.

Cabe mencionar que el gobernador se ha reunido con todos: políticos, empresarios, funcionarios, oposición, ex marginados, contrincantes, príistas, panistas y largos etcéteras, algunas reuniones por interés, otras de cortesía, algunas para afianzar, y unas más para abrir puertas que en el pasado parecían cerradas, con todos ha existido trato, a todos se les ha brindado un espacio; luego de eso, vienen los enfoques y el seguimiento.

El gobernador ha demostrado ser paciente. Las siguientes reuniones, como la que sostuvo con los diputados ya no son de atención, son de trabajo, de equipo, y evidentemente el G5 y Roberto Bautista no forman parte, porque son de otros equipos y sostienen reuniones a las que no es invitado el gobernador.

El mensaje pues a quién le hiciera falta saberlo es sobre el control del Congreso y la fuerza que se está armando de cara al 24. Por cierto en esta reunión, sólo una persona del equipo cercano del gobernador. Y en el mes que es, o sea, sin Julio a la vista.