Drones usados por el narco; senado propone un registro para combatirlo

• El senador de Morena, Antonio Morales, ha propuesto fortalecer el marco legal vigente mediante una reforma a la Ley de Aviación Civil.
• Se busca robustecer el control de aeronaves no tripuladas para frenar su uso con fines ilícitos.
• En Puebla, se han retirado cámaras de vigilancia para evadir a la autoridad.

El crimen organizado en México ha encontrado en los drones una poderosa herramienta para expandir y sofisticar sus operaciones. Estos dispositivos, pensados originalmente para labores recreativas, agrícolas o de vigilancia legal, ahora son utilizados por cárteles para el traslado de drogas, tareas de espionaje y monitoreo de movimientos policiales. Esta situación ha encendido las alarmas en el Congreso, donde se plantea una reforma más estricta para regular su compra y operación.

En este contexto, el senador de Morena, Antonio Morales, ha propuesto fortalecer el marco legal vigente mediante una reforma a la Ley de Aviación Civil. Aunque desde el año pasado existe una normativa sobre el uso de aeronaves no tripuladas, especialistas y autoridades coinciden en que ha resultado insuficiente frente a la rapidez con la que el crimen organizado se adapta a las nuevas tecnologías.

La propuesta contempla la creación de un Registro Aeronáutico de Sistemas de Aeronaves Pilotadas a Distancia, que estaría a cargo de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC). En dicho registro se inscribirían tanto compradores como vendedores de drones, quienes deberán entregar documentación rigurosa como identificación oficial, RFC, póliza de seguro por daños a terceros, certificado de matrícula, licencia de pilotaje y constancia de compra.

Tecnología al servicio del narco

De acuerdo con informes de inteligencia, los cárteles han empezado a usar drones para transportar pequeñas cantidades de droga a través de zonas fronterizas, pero también los emplean para tareas de vigilancia: sobrevuelan zonas controladas por las autoridades, identifican rutas alternas para evitar retenes, e incluso coordinan escapes de líderes criminales ante operativos sorpresa.

En estados como Puebla, las autoridades han detectado que los grupos delictivos también instalan videocámaras en zonas estratégicas para tener el control territorial y anticipar movimientos de seguridad pública. Recientemente, el secretario de Seguridad Pública del estado, Francisco Sánchez González, informó el retiro de 19 cámaras vinculadas a organizaciones criminales en el Centro Histórico de la capital.

Estas cámaras, según reveló el presidente municipal José Chedraui Budib, operaban desde hace al menos seis años en comercios del primer cuadro de la ciudad, lo que evidencia una operación de largo plazo bajo el radar de anteriores administraciones municipales.